- Quien se tire al estanque, consiga atravesarlo y salga vivo del otro lado ganará mis coches, mis aviones y mis mansiones.
Prácticamente de inmediato, alguien salta al estanque...
La escena es impresionante. Lucha intensa, el intrépido se defiende como puede, sostiene la boca de los cocodrilos con pies y manos, tuerce la cola de los reptiles. Mucha violencia, gritos, pánico y emoción entre todos los asistentes.
Después de algunos minutos de terror, el valiente hombre, herido y casi desnudo consigue salir del estanque.
Gritos de júbilo de los invitados y el millonario se aproxima, lo felicita y le pregunta:
- ¿Dónde quiere que le entregue los coches y los aviones?
- Gracias, pero no quiero ni sus coches ni sus aviones.
- ¿Y las mansiones?
- Tengo una hermosa casa, no preciso de las suyas. Puede quedarse con ellas. No quiero nada que sea suyo.
Impresionado, el millonario pregunta:
- Pero si usted no quiere nada de lo que ofrecí, entonces ¿Qué quiere?
El hombre responde irritado:
- ¡Encontrar al hijo de puta que me empujó al estanque!
MORALEJA:
Somos capaces de realizar muchas cosas que, a veces no nos creemos capaces. Sólo necesitamos un empujoncito.
En ciertos casos... ¡Un hijo de puta es necesario en nuestras vidas!
3 comentarios:
Ja. Posdata: identifique al suyo.
Jajaja... charros.
Pero es cierto o_O
yo ya lo identifiqué, trabaja en el ifai se llama diego y se apellida curiel, cualquier queja ya saben. Gracias
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